Desde los albores de la humanidad, el trabajo del metal ha garantizado resistencia, dureza, confiabilidad y la más alta calidad en una variedad de productos. Hoy en día, estas ventajas de los componentes forjados adquieren mayor importancia a medida que aumentan las temperaturas, cargas y tensiones de funcionamiento.
FalsificadoLos componentes hacen posibles diseños que se adaptan a las cargas y tensiones más altas. Los avances recientes en la tecnología de forja han aumentado considerablemente la gama de propiedades disponibles en las piezas forjadas.
Económicamente, los productos forjados son atractivos debido a su confiabilidad superior inherente, capacidades de tolerancia mejoradas y la mayor eficiencia con la que las piezas forjadas pueden mecanizarse y procesarse posteriormente mediante métodos automatizados.
El grado de confiabilidad estructural logrado en una forja no es superado por ningún otro proceso de trabajo de metales. No hay bolsas de gas internas ni huecos que puedan causar fallas inesperadas bajo estrés o impacto. A menudo, el proceso de forjado ayuda a mejorar la segregación química del material de forjado al mover el material de la línea central a varias ubicaciones a lo largo del forjado.
Para el diseñador, la integridad estructural de las piezas forjadas significa factores de seguridad basados en un material que responderá de manera predecible a su entorno sin un costoso procesamiento especial para corregir defectos internos.
Para el empleado de producción, la confiabilidad estructural de las piezas forjadas significa requisitos de inspección reducidos, respuesta uniforme al tratamiento térmico y maquinabilidad consistente, todo lo cual contribuye a tasas de producción más rápidas y costos más bajos.
Hora de publicación: 20-jul-2020